lunes, 26 de diciembre de 2011

Sideral




¿Y qué si hubiese no una, sino dos lunas alrededor de
un sol violeta?

¿Serían iguales los dedos a las lombrices?

¿Serían los úteros cámaras de tortura y la sangre clorofila?

¿Puede un árbol dar origen al fantasma o sólo es el
susurro del viento que le arranca suspiros a la tierra su enemiga?

¿Por qué puedo yo respirar veneno y continuar en pie, si las
comisuras de mi esquina están corroídas y llenas de pústulas?

Quien pueda responder que no lo haga, que se mantenga
silente y ajeno. No quiero saberlo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario